Si estás buscando sillones baratos debes de evitar que se cumpla ese tópico de que lo barato siempre resulta caro. Es totalmente factible comprar a buen precio y conseguir calidad, pero hay que saber en qué se puede ceder y qué es importante para que el sofá sea de la mejor calidad.
Uno de los aspectos más importantes en un sofá es que sea resistente y para eso debe de tener un buen armazón, preferiblemente de madera maciza o de metal. Es fácil saber si el armazón del sillón es de calidad, solo hay que agacharse y tratar de levantarlo por un lado. Si lo levantas fácilmente y el sofá es ligero, es que no tiene un buen armazón y no está pensado para durar.
Otro aspecto muy importante en el sofá es el que tiene que ver con el relleno. Una espuma muy fina y de mala calidad se deformará con gran rapidez. Esto hará que pronto sea incómodo estar sentado en el sillón porque o bien el cuerpo estará hundido o bien se notará una base muy dura.
Una espuma gruesa siempre es preferible y, cuanto más pese, de nuevo querrá decir que tiene más calidad. Un buen armazón y una buena espuma garantizan la durabilidad del sofá. Pero ahora vamos a ver en qué puedes ahorrar si quieres un sillón a muy buen precio.
Una de las primeras cosas en las que puedes ahorrar es en el tapizado. No tienes por qué elegirlo de mala calidad, pero quizás si uno que no esté de moda. Tanto si regateas en la calidad como en el diseño tienes que pensar que tendrás que gastar a parte en una buena funda, pero esto suele compensar.
Esto es así en todos los casos, porque las fundas son siempre buena opción para los sofás, pero si hay niños una funda lavable es imprescindible. Por eso, fíjate en la calidad y menos en la apariencia, porque esta la vas a cambiar siempre al cubrir el sillón.
Otra manera de abaratar el coste del sillón es evitando pagar la entrega en casa. Un sofá de muchas plazas puede ser muy complicado de subir, sobre todo si no hay ascensor o no cabe en el mismo, pero un sillón individual, aunque sea pesado, se sube entre dos personas con facilidad y puedes ahorrarte una media de entre treinta y cincuenta euros.