Te descubrimos los cinco secretos mejor guardados de los decoradores de interior, usados para conseguir sus mejores diseños.
1) Las cortinas a medida. Las cortinas a medida dan un toque muy elegante a salones y dormitorios que tienen ventanas con medidas poco convencionales. Quedan ideales, se realizan con la tela que más nos guste y tienen exactamente el largo y ancho decidido. Normalmente, se eligen materiales de buena calidad por lo que son cortinas que realmente visten una habitación.
2) Los muebles de obra. Los muebles de obra son ideales para aprovechar al máximo los rincones de la casa en los que podrían no tener espacio los muebles de tienda. Las estanterías, los muebles de salón, los armarios empotrados o incluso los cabeceros de cama son algunas de las opciones de obra que pueden quedar perfectas en cualquier hogar.
3) Los colores personalizados. En lugar de comprar colores de pintura que ya están creados se debe de optar por mezclas y tonos personalizados. Se consigue así una mayor originalidad en los resultados. Si lo que te preocupa es tener pintura de repuesto o poder comprar más si te quedas corto con la inicial, no hay problema, en las tiendas especializadas te hacen mezclas personalizadas y te dan el código para que puedas comprar exactamente el mismo color tantas veces como necesites.
4) Las tiendas de muebles usados. Son ideales para comprar pequeños muebles auxiliares e incluso elementos de decoración. Muchos están en perfecto estado y algunos, aunque tienen huellas del uso, tienen un toque vintage muy atractivo y de total actualidad. Algunos de estos muebles necesitan ser restaurados, algo que puede ser una afición muy entretenida pero que también se puede dejar en manos de profesionales. Los muebles rehabilitados son ideales para decorar casas estilo retro o para viviendas de campo.
5) Una pieza clave en cada habitación. Los mejores decoradores de interiores centran sus esfuerzos en una pieza en cada habitación. Puede ser el sofá en la sala de estar, la mesa en el comedor o la cama en el dormitorio. Este elemento debe de ser de calidad y de diseño y es en el que se invierte más dinero, ahorrando en el resto de los complementos que tienen que hacer juego con el principal. Al decorar de esta manera se evita comprar muebles que finalmente no combinan o que hacen que la habitación se vea abarrotada.