En muchos hogares es tradición que a partir de septiembre o de octubre comiencen a hacerse las compras para Navidad. Cada mes se compra algo, un mes la cena de Nochebuena, el siguiente la comida de Navidad… o, simplemente, se compra todo el pescado junto un mes, la carne otro y el marisco otro.
Cualquier ama de casa sabe que de esta manera se consigue un importante ahorro porque el marisco, por ejemplo, comienza a encarecerse a partir de noviembre y en diciembre puede llegar a alcanzar precios astronómicos.
En el sector de la hostelería ocurre otro tanto. Ahora no hay tanta demanda de productos como la cigala congelada para hosteleria o el langostino, pero en breve van a empezar a llenar sus cámaras congeladoras todos los negocios en previsión de que en diciembre tengan todas las fechas copadas con las famosas cenas de empresa y celebraciones de amigos previas a la Navidad.
Cada año se adelantan más estas celebraciones y si antes era lo habitual que comenzaran a pedir cita para después del puente de la constitución, ahora ya se pide a primeros de mes e incluso hay quienes adelantan la celebración a finales de enero, un mes antes de que se celebre la Navidad.
Este año se prevé que estos adelantos sean más comunes al tener los espacios más acotados en los restaurantes, por lo que tener todo listo a tiempo facilitará el poder atender a estos clientes que prefieren llevar a cabo sus comidas con mucha antelación para evitar no disponer de sitio en el mes de diciembre.
Otra ventaja de tener comprado ya el marisco e incluso la carne es que ya se sabe cuanto nos va a costar el menú y, por tanto, el precio que vamos a tener que ponerle para obtener la rentabilidad esperada. Por tanto, pueden comenzar a realizarse los menús de Navidad y de Fin de Año con precios cerrados y enviarlos a empresas o hacer campañas en Internet.
Esto permite adelantarse a la competencia y realizar todas las reservas con tiempo, pudiendo organizarse mucho mejor en cuanto a las necesidades de personal y a los horarios. Se trata de poder atender a cuantos más grupos mejor dentro de las directrices que haya que seguir para que todo el mundo pueda disfrutar de sus celebraciones de una forma totalmente segura.