Si te gusta ponerte botas sabrás que lo de los cordones puede llegar a ser un mundo repleto de matices. Los cordones calzado sirven para mucho más que para atarse las botas y que no se caigan. Han tenido toda una serie de significados, comenzando por los que les han dado las diferentes tribus urbanas. Las mismas botas, con cordones de diferentes colores, podían ser sinónimo de pertenencia a una u a otra tribu de ideologías totalmente enfrentadas.
Pero lejos de todo eso, los cordones son también importantes por el material en el que están realizados: algodón, algodón encerado, nailon, poliéster, fibra de carbono, yute… y todos ellos con diferentes tipos de resistencia y distintas características.
Los cordones de yute, de cáñamo o de otras fibras naturales son perfectas para botas realizadas también en estos tejidos y que suponen una apuesta claramente ecológica. Es el tipo de cordón que se utiliza en zapatillas de loneta y en alpargatas, pero que también se puede ver en botas de estos materiales.
Los cordones de fibra de carbono son muy resistentes y se utilizan para las botas de los patines, las de los motoristas y, en general, aquellas que tienen que sujetar muy bien el pie y que no pueden permitirse un desliz.
Los de algodón, nailon y poliéster son los que encontramos en la mayoría de las botas que compramos en tiendas y también los materiales en los que están fabricados la gran mayoría de los cordones de repuesto que compramos cuando queremos sustituir unos viejos.
En la mayor parte de los casos, los cordones de las botas son del mismo color que ellas. Negros, marrones o granates en su mayoría. Pero en los últimos tiempos hemos podido ver botas de todos los colores e incluso de varios colores a un tiempo. Esto también ha llevado a cambios en los fabricantes de cordones que se han tenido que adaptar a las nuevas tendencias.
Incluso ha dejado de sorprender ver a una persona con botas negras y cordones verdes, azules o incluso fosforitos para destacarlos. Normalmente, combinados con alguna prenda de ropa. Una moda que comenzó con el calzado deportivo pero que se ha extendido también al calzado casual de calle.
Lo último en lo que se refiere a cordones son los cordones elásticos, que permiten que los niños se quiten y se pongan el calzado sin ayuda de los mayores.