Categoría: Clínicas

El cabello es algo muy importante en la imagen de cualquier persona. Muchos hombres ya no se resignan a raparse la cabeza o a ser calvos como sus padres y abuelos y buscan tratamiento para su alopecia. Lo primero que necesitan para combatir este problema es olvidarse de remedios caseros, de lociones de peluquería o tiendas de cosmética y acudir a quienes realmente saben del tema: los dermatólogos especializados.

Es importante acudir a un especialista dermatologia medica quirurgica en Vigo tan pronto como se detecte el inicio de un problema de alopecia para que este diagnostique el tipo de alopecia ante el que se encuentra y ofrezca el mejor tratamiento. En algunos casos, la alopecia puede ser reversible y frenarse, mientras que en otros solo puede lograrse un avance más lento. Pero en ambos casos la diferencia entre acudir a un especialista y no hacerlo es más que notable.

Como también es notable la diferencia entre acudir a una buena clínica y hacerlo en alguna clínica low cost en Turquía. En los últimos años la moda de los trasplantes de pelo en Turquía ha llegado a España y son muchos los hombres que han viajado para someterse a estas intervenciones. Los dermatólogos españoles ya hace tiempo que se encuentran con problemas derivados de este tipo de intervenciones.

Desde infecciones que se producen por un mal cuidado de las cicatrices, dado que el paciente viaja de vuelta a casa con las heridas todavía sin cerrar y no pasan las revisiones necesarias tras la intervención. Pero también se han detectado problemas mucho mas graves. Uno de los peores es cuando se realiza mal la extracción del cabello a trasplantar.

Los especialistas saben bien que el mejor cabello para el trasplantes es el de la zona trasera de la cabeza ya que es el más fuerte y el que no suele perderse nunca. Pero si se quita de una forma incorrecta, puede darse el caso de un trasplante mal hecho que, al tratar de arreglarse por otro profesional, no sea posible debido a que se ha dañado la zona que tenía que donar el cabello.

Lo barato puede salir muy caro y en una cuestión tan importante para la imagen de la persona, lo mejor es ponerse en las mejores manos, en una clínica española que responda ante cualquier problema y ofrezca todas las garantías.

Son tiempos extraños en los que la enfermedad está siempre en primer plano. Al estar constantemente bombardeados por datos y noticias sobre enfermedad y muerte es como si las personas se sintieran más débiles o susceptibles. Es difícil de interpretar, pero muchas personas tienen la sensación de que su salud está peor que hace un año, y tampoco se puede explicar muy bien por qué.

En mi caso, desde hace unos meses empecé a desarrollar unos fuertes picores en diversas zonas del cuerpo, sobre todo en la cara. Tengo tendencia a no preocuparme demasiado de las cuestiones de salud, cuando no considero que sean graves. “Ya se pasará solo”, me solía decir. Pero este clima de histeria colectiva parece que también me ha afectado y empecé a preocuparme por el asunto. Ya digo que hace años, si me hubiera pasado esto, tal vez no le habría prestado atención, porque seguramente estaría entretenido con otras cosas. Pero ahora no hay manera de entretenerse con nada y centré todos mis pensamientos en los picores.

Y cómo tengo buena relación por cuestiones laborales con una clinica estetica vigo cercana a mi casa, acudí a consultar para ver si podían tranquilizarme un poco. Lo primero que me dijeron es que tenía la piel muy seca y que debía hidratarla mejor. Tan sencillo como eso. No soy de esa clase de hombres que piensa que la ‘estética’ es solo para mujeres, ni mucho menos. Lo mío no es arrogancia, sino pura dejadez. Nunca me he puesto ninguna crema, por pasotismo, aunque pudiera pensar que mejorarían no solo mi aspecto, sino también mi salud. 

Por el momento, en la clínica estética Vigo me dieron algunas indicaciones para hacer un cuidado de la piel un poco más prudente. Y es que cualquier cosa que hiciera sería positivo, porque hasta ese momento no hacía nada. Y efectivamente empecé a notar como disminuían los picores e incluso desaparecían en algunas zonas. Así que una de las cosas buenas que ha traído esta situación, es que he decidido cuidarme un poco más y estar más atento a mi salud, que uno va cumpliendo años y nunca se sabe.

Cuidarse no es garantía de tener un cuerpo perfecto. Hay factores que influyen en cómo nos vemos y uno de los más importantes es la acumulación de grasa en zonas muy concretas del cuerpo. En el caso de las mujeres las zonas problemáticas suelen ser la cadera, los muslos, la zona de las rodillas y la parte superior de los brazos mientras que los hombres tienden a acumular grasa no deseada en abdomen y pecho.

Son zonas en las que es realmente complicado incidir a base de ejercicio y la dieta tampoco es la solución ya que en muchos casos no se desea perder peso en general, sino solo grasa en las áreas concretas mencionadas. En estos casos, la liposucción de bajo precio es la mejor manera de conseguir ese cuerpo que se desea de una manera fácil y, ahora también, económica.

Pero ¿de qué hablamos concretamente cuando nos referimos a una liposucción de bajo precio? ¿Se está corriendo algún tipo de riesgo adicional? Hasta ahora, cuando una persona quería pasar por quirófano para quitarse grasa lo normal es que tuviera que hacerlo bajo anestesia general. Esto obligaba a que tuviera que quedarse ingresada al menos durante una noche y el siguiente día, lo que encarecía mucho el proceso.

Actualmente, estas intervenciones ceñidas a zonas concretas se llevan a cabo con anestesia local, por lo que es mucho más económico y también mucho más relajante para el paciente. Este es sedado para que no se ponga nervioso, pero una vez que la operación acaba se le despierta y en solo un par de horas ya puede estar en su casa de nuevo.

Dado que los postoperatorios son sencillos y solo hay que seguir las instrucciones del médico, pueden llevarse a cabo en el hogar complementándolos con las visitas que se fijen a la consulta. Mucho más cómodo y mucho más sencillo para todos.

Por supuesto, las garantías de la operación son exactamente las mismas y todo transcurre con las mismas medidas de seguridad que cualquier otra intervención quirúrgica. Incluso es posible operar de esta manera dos zonas diferentes según el criterio de médico. Los resultados de la operación son visibles desde el primer momento, pero deben de transcurrir algunas semanas hasta que todo se asienta y se ve, por fin, como es el aspecto definitivo del nuevo cuerpo conseguido.

Por suerte la moda de los pechos exageradamente grandes ha quedado atrás y ahora se aprecia la belleza de la naturalidad. Esto se refleja en las operaciones de aumento de pecho que han dejado de realizarse en tallas XXL para optar por tamaños más normales triunfando las copas B y C.

En lo que se refiere a la forma de los pechos también ha habido cambios. Las formas excesivamente redondeadas se han abandonado para adoptar otras mucho más naturales y favorecedoras. También han variado los materiales y son mucho más seguros que los de años atrás.

Por todos estos motivos muchas mujeres se han decidido a operarse para aumentar ligeramente su talla y tener un busto más atractivo pero sin renunciar a la naturalidad en la forma de su pecho. Así, podrán lucir un bonito escote sobre todo ahora que llega el verano y toca ponerse el bikini.

Las operaciones de pecho de este tipo son muy sencillas, ya que salvo casos muy especiales los implantes se colocan por encima de la musculatura. Al no ser tamaños muy grandes la piel cede con facilidad y se adapta muy bien al relleno. Esto hace que el post operatorio sea corto y poco doloroso, al contrario que los implantes por debajo del músculo que tienen que hacer que estos se muevan y cambien de forma, lo que causa mucho dolor.

La operación también es sencilla. Los cortes se realizan de manera que quedan perfectamente ocultos en el pliegue del pecho o alrededor del pezón y no quedan cicatrices visibles. Además, al realizarse con anestesia local y sedación no es necesario el ingreso hospitalario. Además de ser mucho más cómodo, esto hace que los costes de la operación se abaraten.

Los implantes actuales no necesitan cambiarse cada cierto tiempo, son válidos para toda la vida. Por eso, ya no tiene vigencia eso que muchos decían sobre las operaciones, que condenaban a otras intervenciones futuras. Tampoco impiden dar el pecho al bebé de manera totalmente natural, ya que el implante no tiene por qué afectar a los conductos mamarios.

En cualquier caso, una primera visita informativa a una clínica de confianza ayudará a tomar una decisión sobre qué es lo más adecuado para cada caso en particular y para resolver cualquier duda que pueda haber sobre los implantes para aumento de pecho. De este modo, la paciente siempre sabe qué puede esperar de la intervención e irá a la misma preparada y bien informada.

La liposucción es una intervención estética realizada por un médico especialista en cirugía estética. Consiste en la introducción de finas cánulas en la piel que van hasta la zona en la que están los depósitos grasos, bajo la piel. A través de las cánulas las células adiposas son absorbidas y extraídas del cuerpo, consiguiendo así eliminarlas. Esto hace que desaparezca la grasa localizada que muchas personas tienen en caderas, vientre, glúteos o piernas, por poner algunos ejemplos.

La lipoescultura es un tipo de liposucción algo más complicada, ya que se aplica en diferentes zonas del cuerpo en una sola intervención. Se trata de moldear el cuerpo de una persona que no tiene grasa localizada en una única zona, sino que tiene sobrepeso por todo su cuerpo. Al quitar la grasa, la figura de la persona se marca y se le ve mucho más estilizada.

Muchas personas que antes no se planteaban una liposucción ahora sí piensan en esta técnica debido a la nueva liposucción con anestesia local. Ahora, el paciente es intervenido con anestesia local en lugar de una anestesia general. En algunos casos, se opta por sedar a la persona para que no se entere de nada y no se ponga nerviosa, ya que hay quién puede sentirse un poco mal ante la idea de estar despierto mientras le introducen las cánulas en el cuerpo.

Tras la intervención el paciente está unas pocas horas en observación y puede irse a su casa con las instrucciones que tiene que seguir para que todo vaya bien y las fechas para sus revisiones. Solo tendrá que tomar algunos analgésicos para el dolor que lógicamente puede sentir derivado de los pequeños cortes por los que la cánula fue introducida. También es normal sentir que la zona en la que se ha estado aspirando la grasa está mazada y dolorida.

El cuerpo necesita de un tiempo tras la intervención para recuperarse y que la piel se terse, consiguiendo el aspecto que finalmente se deseaba. Normalmente, se notan los efectos de la liposucción de forma inmediata, pero son seis meses después de la intervención cuando la persona se ve mejor y el espejo refleja el resultado definitivo de la intervención.

Al realizarse con anestesia local no solo se reduce el peligro de la intervención ya que, aunque la anestesia general es normalmente muy segura, siempre tiene algo más de riesgo, sino que también se reduce el precio de la operación, lo que ha contribuido a su popularidad.

Las liposucciones son una de las intervenciones estéticas más frecuentes. Muchas personas acuden a una clínica estética para retirar de su cuerpo depósitos de grasa localizados que no son capaces de perder mediante dietas, como la grasa acumulada en la papada, en el vientre, en las cartucheras o en las rodillas.

También son muchas las personas que acuden a estas clínicas buscando perder una gran cantidad de peso mediante algún tipo de técnica de reducción de estómago, como la sonda gástrica. Para ayudar a que este tipo de intervenciones sean más rápidas y a que el paciente se vea más animado, algunos médicos recomiendan antes una lipoescultura para retirar gran parte de la grasa sobrante. Así, el paciente se ve mejor desde el primer día y psicológicamente se sentirá más inclinado a continuar con las indicaciones del médico en este duro proceso.

Tal vez te hayas planteado realizarte una de estas intervenciones, pero te parezca que no son para ti por lo caras que resultan. Pero tal vez te sorprenda saber que la liposucción de bajo precio es más frecuente de lo que crees. Pero ¿por qué han bajado los precios de las liposucciones? ¿A caso se ha rebajado la calidad del servicio ofrecido?

Lo cierto es que no es así, las liposucciones han bajado de precio porque ahora son intervenciones mucho más sencillas y que requieren de menos gastos. Para empezar, son cada vez más las que se llevan a cabo con anestesia local y sedación en lugar de una anestesia general. Lógicamente, esto ya abarata muchos costes, no solo por lo que se refiere a la anestesia, sino también por todo lo que conlleva la recuperación.

Tras una anestesia local el paciente se va a casa y no tiene que quedar ingresado en la clínica. Teniendo en cuenta que las clínicas estéticas suelen alquilar los quirófanos y las zonas de estancia, la reducción del coste es muy alta y esto va a repercutir directamente en lo que el cliente tiene que pagar por su operación. Gana no solo en la factura, sino también en la comodidad de poder ir a su casa el mismo día de la intervención, lo que hace que todo sea más fácil.

Evidentemente, también hay una mayor competencia. Si hace algunas décadas había muy pocos cirujanos especializados en intervenciones estéticas hoy son mucho más numerosos y por tanto, sus precios son más competitivos.

Con el paso de los años el rostro comienza a acusar diferentes signos de la edad. A partir de los treinta comienzan a aparecer las primeras líneas de expresión que, si no se tratan, se convertirán pronto en arrugas. La hidratación es fundamental en esta etapa, junto con algo de nutrición. Las mascarilas profesionales y los tratamientos hidratantes frecuentes unidos a tratamientos con colágeno ayudarán a que la piel se mantenga elástica y firme.

Según avanzan los treinta la flacidez hace su aparición y se nota como el óvalo de la cara pierde definición ylos pómulos empiezan a hundirse muy ligeramente. Las primeras arrugas suelen llegar con los cuarenta, cuando la flacidez comienza a ser más visible. En esta época hace falta algo más que hidratación para verse bien y por eso muchas mujeres, sobre todo en los cuarenta, comienzan a recurrir a otras técnicas como los rellenos de colágeno en los pómulos y en los labios o los hilos mágicos para tensar la piel del rostro. Las inyecciones de botox bien aplicadas también pueden ser grandes aliadas durante esta etapa.

Este tipo de tratamientos tienen la ventaja de que son totalmente reversibles, por lo que si no nos gusta el resultado a los pocos meses el cuerpo absorbe por completo el botox, el colágeno o los hilos mágicos recuperando el aspecto original. Si por el contrario nos convence el resultado, podemos seguir aplicándolo hasta bien entrados los cincuenta, cuando los signos de la edad son más visibles y aparecen las primeras arrugas profundas.

En esta etapa pueden ser necesarias técnicas más permanentes para conseguir rejuvenecer el rostro. El lifting quirúrgico es tal vez la más conocida de todas las técnicas. Hoy, estas intervenciones son mucho más sencillas que antes y los resultados son mucho más naturales, por lo que más personas se animan a llevarlos a cabo. Esta técnica consiste en realizar pequeños cortes en zonas no visibles para estirar la piel suavemente.

Si bien las mujeres son las que más recurren a todas estas técnicas de rejuvenecimiento facial, los hombres cada vez se animan más a cuidar su aspecto. Tanto por ellos mismos como por requisitos laborales, los hombres también quieren verse más jóvenes y con mejor aspecto durante muchos más años y por eso han comenzado a acudir a los centros de medicina estética buscando soluciones adecuadas para su piel y para sus características concretas.

Las operaciones no son del agrado de casi nadie, porque cuando tienes que hacerte alguna operación es porque hay algo en tu cuerpo que no funciona o que no está bien, además las anestesias son algo que a más de uno le da más miedo que la propia operación a la que se va a someter. Para la gran mayoría de las operaciones se sigue utilizando anestesia, ya sea general o local, pero para otras operaciones ya no se utiliza la anestesia, hoy en día te puedes hacer una liposucción sin anestesia con exactamente los mismos resultados que si te la hubiesen hecho con la anestesia.

Estas operaciones sin anestesia les van muy bien a las personas que están obsesionadas con las operaciones de estética para así poder mejorar sus cuerpos, así no se someten a todos los riesgos que conlleva estar bajo la anestesia, si se van a hacer varias operaciones en relativamente poco tiempo, creo que les es muy beneficioso que no les anestesien en todas las operaciones. Aunque alguna anestesia les pondrán aunque sea muy floja

Personalmente en la única ocasión por la que tuve que pasar por el quirófano, estaba bastante asustado por la inyección que me iban a pinchar en la espalda para así poder dormirme las piernas, pero al final no fue para tanto, ni tan siquiera sentí cuando me pinchaban en la espalda, aunque creo que fue por una pastilla que me habían dado un rato antes de la operación la que me ayudó a no enterarme de nada, al salir de la operación tuve la sensación más extraña que he tenido en mi vida, me tocaba las piernas pero todavía no podía sentirlas,pasó un buen rato hasta que me las pude sentir otra vez, pero después ya me relajé y todo fue bien. Espero que no me tenga que operar en bastante tiempo, si aguanté sin operarme treinta años no sé porque no voy a tardar otros treinta años en volver a operarme. O mejor aún ojalá no tenga que volver a operarme nunca más aunque si anestesia ya no sea tan peligroso.