- El Contratar seguro de salud para pymes adeslas. Las empresas de pequeño tamaño son como familias, a veces mejor avenidas que otras. Pero precisamente, por su pequeño tamaño y la plantilla justa, una baja laboral puede suponer un gran problema para todos. Además de los servicios de una mutua que se encargan de las bajas de carácter laboral, es bueno contar con un seguro para las enfermedades comunes. Estos seguros pueden facilitar que los trabajadores que tienen un problema puedan reincorporarse antes al trabajo o incluso prevenir los problemas de salud al tratarlos antes de que se agraven. Además, ayuda a fidelizar a los trabajadores, que apreciarán este tipo de seguro.
- Una gestoría de calidad. Contar con una buena gestoría es fundamental para que una pequeña empresa funcione como es debido. Contar con gestores de confianza a los que poder realizar consultas y que se encarguen de los pagos de impuestos o incluso de informar cuando hay ayudas o cualquier subvención interesante. El no realizar los pagos a tiempo supone multas que se pueden ahorrar fácilmente con una buena gestión. Si la empresa es pequeña, esta se hará desde una gestoría externa pero si la empresa es algo más grande se puede valorar que haya un departamento de gestión en la misma para facilitar las cosas.
- Cursos de formación gratuitos. Existen muchos cursos de formación para los trabajadores que la empresa abona pero que luego se recupera el importe con descuentos en los pagos de la Seguridad Social. Es muy importante que el personal se forme y esté actualizado para poder implementar todo tipo de mejoras en la empresa sin que sea una dificultad el tener empleados que no conocen las nuevas técnicas. Es bueno que los jefes de personal propongan estos cursos que son voluntarios en su mayoría, pero que pueden llevarse a cabo en horario de trabajo.
- El control personal. No se trata sólo de invertir y montar empresas, hay que llevar un cierto control personal para saber de primera mano qué sucede en las mismas. Si tienes varias empresas no podrás estar a diario en todas ellas, pero sí debes de acudir con frecuencia para conocer siempre qué sucede por tu propia experiencia, incluso cuando tienes gente de confianza en las mismas. Eso te ayudará a encontrar los problemas que puedan ir surgiendo y también a pulir los fallos.
Categoría: Seguros médicos
Contratar Seguros de salud es un trámite necesario para quienes desean recibir una atención médica más rápida, flexible y personalizada, sin molestas listas de espera. Determinados errores deben evitarse al seleccionar la póliza que mejor se ajuste a las propias necesidades.
La elección del copago es uno de ellos. Aunque este método de financiación permite abaratar el coste final del seguro, en la práctica demuestra ser un arma de doble filo. Cuando se presenten las emergencias sanitarias, el asegurado deberá asumir un porcentaje del pago de los tratamientos y servicios prestados, lo que puede suponer un ‘pellizco’ inesperado para su billetera.
Equivocar la modalidad del seguro médico es también fuente de disgustos entre los contratantes. Las pólizas de reembolso, por un lado, dan acceso a médicos ajenos a la compañía, cuyo coste en principio corre a cargo del cliente, para después ser reembolsado por la aseguradora. Por otro lado, las pólizas baremadas funcionan de manera similar a los seguros con copago, mientras que en las pólizas sin hospitalización, este servicio no está incluido en las coberturas, razón por la que las cuotas asociadas son más asequibles.
Es importante revisar asimismo el periodo de carencia estipulado en el contrato, pues las coberturas y asistencias más ‘jugosas’ permanecerán inaccesibles a la espera de cumplirse dicho periodo, que seis a doce meses de duración, dependiendo de la compañía aseguradora.
No obstante, la sola presencia de periodos de carencia no supone ningún descrédito para el producto ni la empresa. En realidad, este mecanismo tiene la finalidad de prevenir abusos y malas prácticas por parte de clientes malintencionados.
Si bien la etiqueta del precio no es irrelevante al contratar una póliza de salud, se recomienda no sobredimensionar su importancia. La asequibilidad es una cualidad deseable, no un requisito esencial; de lo contrario, se seleccionarán indistintamente pólizas low cost de dudosa calidad.
La contratación de un seguro de salud es, en general, un proceso muy sencillo y que no lleva demasiado tiempo. Por ejemplo, adeslas contrata sus pólizas a través de Internet, lo que hace que pueda ser todavía más sencillo para sus clientes.
Para contratar un seguro de salud que cumpla con todos nuestros requisitos y sin tener sorpresas, hay que estudiar los siguientes puntos:
-El cuadro médico. Uno de los primeros puntos a tener en cuenta en un seguro médico es con qué profesionales y con qué centros médicos trabaja. Así, podremos saber si nuestros médicos de confianza estarán incluidos y si podremos, por ejemplo, ser atendidos en centros médicos de referencia a nivel nacional.
-Las prestaciones y copagos. Existen diferentes tipos de seguros de salud. Desde los que ofrecen una cobertura total, con atención médica, pruebas diagnósticas, hospitalizaciones y paso por quirófano hasta los que solo ofrecen atención especializada y la realización de pruebas. Y dentro de cada una de estas variedades, nos encontramos con diferentes tipos de copagos. Todo esto va a influir de forma muy determinante en el precio final del seguro médico y hay que tener claro qué es lo que realmente se necesita y se desea.
Un aspecto importante que valorar es el poder añadir un seguro dental a un precio competitivo, ya que es un tipo de servicio que no está incluído en la Seguridad Social y que es fundamental para toda la familia.
-El precio. Evidentemente, el precio también es muy importante en un seguro de salud. Sobre todo, si se quiere contratar para toda la familia. La existencia de paquetes de salud familiares es un factor a tener en cuenta a la hora de elegir a la compañía de seguros que nos ofrecerá el servicio. Al menos, deben ofrecer descuento a partir de la segunda persona que se añada a la póliza para que esta merezca la pena.
-Los periodos de carencia. Los periodos de carencia son los espacios de tiempo marcados entre la contratación de un producto y el momento efectivo en el que se podrá hacer uso del mismo. Por ejemplo, es común en los seguros de salud establecer un periodo de carencia para realizar determinadas pruebas diagnósticas o para atender un embarazo. Es interesante para el cliente que estos períodos sean lo más breves posible o bien que no existan más que para muy pocos casos.
Cuando se contrata un seguro de salud, como adeslas seguro, una de las decisiones que hay que tomar es sobre el tipo de copago que se va a asumir. Un copago más elevado supone pagar un poco más por las pruebas y por ciertas consultas. Pero siempre va a ser muy precio significativamente menor de lo que costaría dicha consulta o prueba si se realizara de manera privada careciendo de seguro. A cambio de un mayor copago, se consigue una menor cuota mensual.
Esta opción es perfecta para personas sanas que tienen su seguro médico por lo que pueda pasar y para sus revisiones anuales, pero que no necesitan acudir con frecuencia al médico ni están realizándose pruebas de ningún tipo. Así, se ahorra dinero en la mensualidad y se consigue un equilibrio perfecto.
Un copago más bajo, supone exactamente lo contrario. Las pruebas serán mucho más económicas pero a cambio la cuota que se abona todos los meses es más alta. Es un sistema que compensa para aquellas personas que tienen problemas crónicos de salud o que tienen previsto realizarse diferentes pruebas y acudir a varias consultas en un periodo de tiempo.
Existen seguros que ofrecen la opción de no incluir copago alguno. Evidentemente, la cuota es más cara y es un tipo de elección que normalmente ocurre cuando se trata de un seguro médico pagado por la empresa, alguien que quiere desgravar de algún modo esos gastos de seguro o una persona con problemas de salud numerosos, que de esta manera y mediante un pago fijo ya ve cubiertos todos los gastos médicos sin tener que desembolsar a mayores.
La opción sin copago compensa pues a quienes tienen un alto número de visitas médicas y pruebas porque les permite organizar su economía de una manera estable, sin tener altos y bajos en las facturas que pueden descompensar fácilmente un mes en el que se junten muchas visitas a especialistas. Así, pueden usar su seguro sin miedo a los pagos adicionales.
Cada persona debe de estudiar su situación y la de los familiares que van a estar incluidos en el seguro para saber si les compensa o no elegir un seguro sin copago, un copago bajo o uno un poco más elevado. Pero, en cualquier caso, siempre se puede cambiar la opción si las circunstancias iniciales se modifican, lo que es toda una tranquilidad.
Si quieres contratar un servicio de salud, pero no quieres llamar y que comiencen a darte datos y más datos, sino que prefieres informarte antes, lo tienes muy fácil. Si buscas un seguro de calidad como adeslas contratar online es la mejor solución.
Solo tienes que ir a su Web y ver en ella los diferentes tipos de seguros que ofrecen: Adeslas Familia, Adeslas Plena Plus, Adeslas Plena Vital, Adeslas Plena Extra 150 y Adeslas Dental Max. Al pinchar en cada una de las opciones se pueden ver tanto las coberturas como las ofertas promocionales que están vigentes para el contrato.
También podrás elegir entre un seguro individual y uno para toda la familia. Mira las prestaciones y quédate con aquellas que te parecen más interesantes, ¿quieres que tu seguro tenga hospitalización o prefieres tan solo los especialistas? ¿Necesitas que te cubra en cualquier lugar del mundo o solo en España? En los apartados de preguntas frecuentes podrás resolver la mayoría de los puntos que necesitan aclaración más habituales.
Cuando tengas claro qué producto se adapta mejor a tus necesidades puedes introducir tus datos en la Web y te llamarán para resolver cualquier duda que te pueda quedar y darte de alta en la opción que hayas escogido. Cualquiera de las opciones de seguro permite añadir el seguro dental para estar cubiertos también en este terreno por vuestro seguro de salud.
Es importante saber que el precio de un seguro de salud depende de la edad de la persona o personas aseguradas y también de otros factores, como el nivel de copago que se quiera asumir. A mayor copago, menor coste mensual del producto y al contrario. La mayoría de seguros permiten incluso la atención sin copago de ningún tipo.
Cada persona tiene que valorar el número de veces que acude al médico al cabo del año para saber qué le interesa más. No obstante, es posible variar estos copagos. Generalmente, los seguros permiten cambiar cada año, para que de esta manera si las circunstancias personales cambian, también se pueda variar la forma en la que se abona el seguro.
Cuanta mayor sea la personalización del seguro mejor, ya que se evitará pagar por servicios que no se desean y se podrán añadir otros que pueden sernos de gran utilidad, como la fisioterapia o terapias de tipo psicológicos, que no suelen estar incluidas.